La agricultura es el principal motor de la economía mundial
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Apr 30, 2008, 10:00
Por muchos años, quizá siglos, el ser humano tuvo la certeza de vivir en una economía en desarrollo constante, de contar con sistemas políticos capaces de resolver las necesidades básicas y una naturaleza diversa con recursos ilimitados. Pero ,¿qué ha sucedido?. A nivel mundial y regional, todos hemos sido testigos de la fragilidad de la economía, de la política y de la naturaleza. Hay preocupación por el calentamiento mundial, por la pérdida de la biodiversidad, por la crisis de energéticos y del agua; y desde hace más de un año, estamos preocupados por el alza en los precios de los alimentos, aunado a una probable escasez y muy pocas tierras agrícolas para alimentar a más de 6,000 millones de seres humanos, de los cuales 104 millones somos mexicanos.
Debemos entonces tener bien presente que la agricultura es el principal motor de la economía mundial, que es el sustento y subsistencia de una enorme cantidad de personas y es vital para el desarrollo rural, la disminución de la pobreza, y para la producción de alimentos y otras materias primas no comestibles.
¿Qué sucede entonces con la agricultura? Según cifras del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, todos debemos ser responsables de los ecosistemas agrícolas que empezaron a formarse desde que se inventó la agricultura hace más de 7,000 años y saber que hoy en día la cuarta parte de la superficie terrestre está dedicada a la agricultura, pero que el 85% de esas tierras tiene problemas de erosión, salinización, compactación, agotamiento de nutrientes, degradación biológica o contaminación. Se calcula que en México más del 80% de la tierra laborable tiene serios problemas de degradación y tienen baja productividad para producir alimentos de calidad.
El Sistema Producto Oleaginosas es una alternativa que puede contribuir con éxito a la solución de muchos de los problemas que aquejan a los ecosistemas agrícolas de México, porque como ya sabemos, el cártamo, la soya y la canola son cultivos que se adaptan bien a terrenos con problemas de suelos; en comparación con otros cultivos, requieren poca agua, la comercialización está garantizada y, por ser la principal fuente de calorías, la demanda va en aumento.
Pero estas ventajas no son suficientes, es necesario seguir algunas recomendaciones. Hoy más que nunca la administración de la agricultura de oleaginosas necesita no solamente un mayor incremento en la productividad de las tierras existentes, adoptando sistemas de producción más eficientes a fin de satisfacer la demanda, sino también tener en cuenta los tres pilares de la sustentabilidad de los ecosistemas agrícolas: el medio ambiente, el factor social y la situación económica.
En cuanto al medio ambiente se refiere, el ecosistema agrícola de oleaginosas debe estudiar y decidir las estrategias más adecuadas para proteger la biodiversidad y los servicios del ecosistema; asegurar que la agricultura sea productiva, evitar al máximo la invasión de ecosistemas naturales y llevar a cabo un buen manejo de los recursos naturales.
El ecosistema agrícola de oleaginosas debe evaluar el aspecto social a partir del cuidado de la salud y el bienestar de la población rural, asegurando que tenga un buen potencial de desarrollo al garantizar alimentos para el ser humano y para los animales, fibras, agua y fuentes de energía.
El ecosistema agrícola de oleaginosas tiene como objetivo asegurar el incremento del ingreso para las comunidades agrícolas, así como el incremento de todo los productos de la cadena, tener presente que no existe una única y simple solución del manejo sustentable de un ecosistema agrícola, y saber que la administración eficiente de agricultura es una búsqueda constante de nuevas estrategias.
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