Factores que afectan la supervivencia de las semillas de canola a los 21 días después de la emergencia Jun 10, 2009, 17:22

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Tomado del Consejo de Canola del Canadá y adaptado a las condiciones de producción de canola de México

Como regla general, alrededor del 50-60% de las semillas tanto hibridas como de variedades sobrevivirán para producir plántulas viables. Excepto por las condiciones meteorológicas, la mayoría de los factores que afectan la supervivencia pueden ser controlados hasta cierto punto.

La densidad de siembra apropiada para alcanzar las poblaciones de plantas (250-350 mil plantas por ha) requiere de una buena estimación de la sobrevivencia de semillas y de plántulas para cada situación. La sobrevivencia en primavera puede variar mucho, en un rango desde el 25 al 75% dependiendo de muchos factores. A continuación se presenta una discusión de cómo algunos factores pueden afectar a la sobrevivencia de semillas y plántulas:

1)     Tamaño de las semillas: Cuanto mayor sea el tamaño de las semillas, mayor será su vigor. A mayor vigor de la semilla se tendrá una mejor relación semilla/plántula y estas tendrán mayor capacidad para soportar problemas de stress en su desarrollo inicial y mayor sobrevivencia.

2)     Semillas con clorofila: Un mayor contenido de clorofila en las semillas (semillas inmaduras) puede reducir el vigor y aumentar la mortalidad.

3)     Híbridos vs variedades: Normalmente los híbridos tendrán de 10 a 20% más vigor en las plántulas en desarrollo que las variedades.

Recuerde ajustar la densidad de siembra de acuerdo al tamaño de las semillas y del tipo de sembradora que vaya a utilizar, para asegurar que está sembrando la cantidad correcta de semilla para lograr una buena población de plantas (2 a 4 kg por ha).

4)     Temperatura de la cama de siembra: Suelos fríos (<5°C) en la siembra, y durante las dos semanas siguientes, pueden aumentar la mortalidad en un 10-20%. La temperatura ideal del suelo para la germinación es de al menos 10°C, pero cerca de los 5°C es una temperatura aceptable.

5)     Las heladas: las heladas tempranas pueden afectar la población de plantas, pero en la mayoría de los casos un número suficiente de plántulas de canola pueden sobrevivir a estas. Es importante observar que se tengan opciones para el control de la maleza para mantener un campo limpio de canola hasta lograr que cierre completamente la población de plantas. Si la canola se siembra temprano con el fin de mejorar el potencial de rendimiento, el aumento del riesgo de las heladas, a principios de primavera puede justificar un aumento en la densidad de siembra para asegurar una buena densidad de población.

6)     Profundidad de siembra: la profundidad óptima de siembra es de media pulgada a una pulgada (2 a 3 cm). A mayor profundidad de siembra mayor es el tiempo para la emergencia, menor cantidad de plántulas y por lo tanto la densidad de población, menor desarrollo de plantas y sus raíces, se alarga el ciclo a madurez del cultivo y se incrementa el riesgo de enfermedades en la plántula. Todos estos factores provocan un incremento en la mortalidad de plántulas y, finalmente reducción en los rendimientos.

7)     Velocidad de la siembra: ¡Más despacio¡ Esto garantiza la uniformidad de la distribución de las semillas y su emergencia, junto con una buena distribución del fertilizante al mismo tiempo. Si es necesaria una mayor velocidad de siembra para cubrir una mayor superficie en menor tiempo, debe saber que esto afecta la emergencia y finalmente, la densidad de población.

8)     Fertilización en la hilera de siembra: Los altos niveles de fertilizante (especialmente nitrógeno en forma de urea) colocado en la hilera de siembra pueden incrementar la mortalidad de las plántulas, especialmente si el equipo deposita la semilla junto con el fertilizante en suelos con baja humedad y si además es en suelos arenosos.

9)     Equipo de siembra y calidad de la cama de siembra: la calidad de la cama de siembra depende de la textura, humedad y laboreo del suelo, de los implementos utilizados y residuos de cosecha en el terreno.

La siembra en un suelo que no esté bien mullido (bien desterronado) puede provocar que algunas semillas no queden en contacto con el suelo, cuando no hay buena humedad.

El encostramiento de los suelos con bajo contenido de materia orgánica también puede incrementar la mortalidad o evitar una buena emergencia de plantas.

Grandes cantidades y/o la distribución desigual de los residuos de la cosecha pueden ocasionar problemas de colocación de las semillas, quedando algunas semillas entre la paja.

10) Rotaciones cortas y enfermedades: Si se deja poco tiempo entre cultivos de canola (menos de dos años) se incrementa la probabilidad de mortalidad debido a enfermedades de la plántula. Otros cultivos hospederos o el uso de herbicidas residuales en la rotación también puede ocasionar problemas de establecimiento del cultivo.

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